Preguntas y respuestas: ¿Que puedo hacer si me sale una almorrana durante el embarazo/parto?

Seguramente que alguna de vosotras ha sufrido almorranas/hemorroides durante el embarazo o le han aparecido traicioneramente durante el parto despues de todo el esfuerzo y los pujos realizados, en resumen, por H o por B son muy pocas las mujeres que se libran de estas "famosas amiguitas", por eso ya era hora de dedicarles un pequeño apartado.
Durante el embarazo lo mejor para prevenirlas es tomar una dieta muy rica en fibra, una buena racion de fruta (por ejemplo kiwis) y una buena racion de verdura (por ejemplo espinacas) todos los dias para favorecer el transito intestinal, eso y caminar mucho, muchisimo, aun asi las muy cabritas aparecen igual, normalmente hacia el segundo trimestre cuando el peso del feto ya es bastante notable. Entonces podemos echar mano de las pomadas homeopaticas, yo concreramente utilizaba una llamada avenoc, del laboratorio boiron, me la aplicaba tres veces al dia, la verdad es que se me desinflaron bastante pasaron de ser un racimo de uvas gordas a pequeñas uvas pasas, algo es algo. La pomada la acompañaba con copos de avena, a la noche me tomaba un tazon de leche con varios puñados de avena, la verdad es que desde aquella iba al baño dos veces al dia, lo que equivale a cero estreñimiento. Para aquellas personas que os encontreis en la misma situacion, lo primero de todo es acabar con el estreñimiento, solo asi funcionara la pomada.
Aquellas uvas pasas que parecian haberse controlado volvieron a florecer con el trabajo de parto, en este caso le podia aplicar hielo 3 veces al dia, y otra pomada mas fuerte, en cuestion de un dia hubo una mejoria notable.

Visita pediatra tercer mes + revision del trancazo

Sí señores, es alucinante como ha pasado el tiempo, el renacuajo ya tiene  3 mesecillos, y como no, tocaba visita con la enfermera, cuando lo vio se quedo impresionada con lo enorme que estaba, si ya casi no cojía ni en la báscula, lo teníamos que sujetar, con un poco que se moviera salía fuera. Este mes el gordito pesaba 7220 gramos y media 62 cm ya, menudo estirón que pego en un mes, nos explico que el peque está muy por encima del percentil, más concretamente está en percentil 90, si sigue engordando así el mes siguiente se saldría del percentil, lo que no resulta muy bueno, pero ¿qué voy a hacerle? ¿Le quitó la teta? Pobrecillo, no lo voy a matar de hambre, tendrá que comer lo que necesite. Aún que no le tocaba visita a la pediatra, esta se pasó igual a verlo, tenía que ajustarle la dosis de ranitidina según su peso y mirarle como le había progresado el catarrito, parece que ya sólo quedan resquicios de este, y menos mal, porque el pobre dormía fatal. Le dieron la siguiente dosis del rotavirus, que esta vez la tomo mejor que la última y para casa.

Comer amar mamar

Hoy quiero hablar de un libro que me ha cautivado por completo, por su forma tan distinta y tan real de ver la maternidad, de ver la maternidad como lo que es, un instinto natural de las madres hacia sus peques, un instinto natural como el que tienen los animales hacia sus crias, que actuan sin saber lo que hacen, simplemente por lo que sienten, por eso recomiendo infinitamente este libro, que a diferencia de muchos otros no te enseña a ser madre, no te dice lo que deberias hacer, sino que te anima a que actues mediante tu instinto maternal, como hacian hace 100.000 años.
Carlos Gonzalez, el autor de este libro, parte de la base de que hoy en dia las madres ya no saben ser madres, no saben ser madres por que la sociedad asi lo ha querido, se han dejado llevar por consejos de pediatras, de familiares, amigos, dejando de lado lo que ellas realmente sentian, ignorando ese instinto maternal, tal vez por miedo. Un ejemplo que expone el libro trata de una mujer que acude al pediatra con su hijo, este comienza a llorar desconsolado, la madre lo mece, el bebe sigue llorando, pero ella se resiste a cogerle, entonces otro pediatra que estaba por alli le dice este niño esta pidiendo brazos, no lo coje? A lo que la madre responde es que como dicen que cojerle en brazos es malo...La mujer tenia miedo a cojer a su propio hijo porque segun su pediatra era malo.
¿Malo? ¿Pero malo por que?
Los pediatras les suelen decir a las madres, si dejas que llore y no le cojes lo vas a favorecer en un futuro  Pero...como puede ser favorable algo que te imponen?
¿Algo que haces sin sentirlo?
Los bebes, los recien nacidos, necesitan contacto fisico constante, mimos, cariños, para no desarrollar problemas sociales en un futuro. Cuando lloran lo hacen por que no tienen consciencia, no saben donde esta su madre, no la perciben y se ponen nerviosos, no saben cuando va a volver, y los segundos les parecen horas, por eso lo mas favorable para el niño es estar en contacto fisico con su madre, lo que ademas favorece su vinculo afectivo.
¿ Y por que lloran los niños instantaneamente cuando se les deja solos? Eso es efecto de la seleccion natural, hace 100.000 mil años los niños lloraban sin consuelo cuando sus madres les dejaban solos en la selva, y esa era la forma que tenian de que su madre se diera la vuelta, solo los que lloraban al instante sobrevivian el resto eran deborados.
¿Y por que los niños duermen seguido solo si es con su madre? Tambien nos remontamos a los antepasados, cuando no habia cunas, ni ningun otro immobiliario, los bebes dormian encima de sus madres, de las que mamaban cada poco tiempo, y lograban no morirse de hambre. Pero tambien resulta logico, una persona adulta solo duerme si se siente segura, y donde se sienten los niños mas seguros? En su habitacion no es la respuesta.
Un estudio de afinidad con los padres desvela que los niños que tienen mayor vinculo con estos, lloran desconsolados cuando los separan de su madre, ya que no entienden a donde se va, si los abandona, no sabe lo q esta pasando, los niños mayores de tres años pediran una recompensa a la vuelta de la madre, como muestra de su afecto, que si no se le da con caricias, mimos, dedicandole tiempo, pediran juguetes, gominolas, es decir cosas materiales, las madres que compensas asi a sus hijos no le estan enseñando el verdadero significado del amor, el amor no se compra con dinero.

Preguntas frecuentes: ¿Que llevar en la bolsa del hospital?

Lo primero comentar que yo fui por la seguridad social, por tanto voy a comentar lo que lleve yo al hospital publico, en uno privado creo que no te dan nada y tienes que llevarlo todo.
Para mi: unas chanclas para la ducha, no se que me daba poder coger hongos, unas zapatillas comodas, braguitas desechables, discos de lactancia, sujetador de lactancia, el ipod, unos coleteros, las pastillas ginecomplex, unas pezoneras (mas bien por prevenir), la camara de fotos, tenia que inmortalizar los primeros momentos de vida de mi pequeño, el telefono movil para avisar a amigos y familiares, cepillo y pasta de dientes, peine, colonia y una muda limpia para salir del hospital. Camisones, compresas, jabones y geles, toallas, los suministraba el hospital.
Para el bebe: unas tijeritas para cortarle las uñitas, toallitas, y una muda para salir del hospital, lo que comunmente se conoce como primera puesta. Pañales, gasas, alcohol de 70, protectores, mantas, ropita, lo suministraba el hospital.

Preguntas frecuentes: ¿Que comprar para las primeras semanas de vida de nuestros bebes?

Esta es una pregunta que me han hecho muchas amigas, la verdad que yo tambien me la hice en su momento. Desde mi experiencia he de decir que lo que no se debe comprar bajo ningun concepto, o por lo menos en cantidad es la ropita de 0 meses, justo es a la que mas vamos por lo mona que es, hay que evitar tentaciones, lo primero no sabes como va a ser tu futuro bebe, si muy grande, muy pequeño o normalito, lo segundo no te imaginas la cantidad de ropa que te van a regalar tus familiares, la mitad de ella quedara sin poner, los bebes crecen muy pero que muy rapido, lo tercero comprar solo lo justo y necesario, lo que sabes que va a poner constantemente pero que nadie te regala, por ejemplo, los bodys, los pijamitas...aun asi tampoco es que necesitemos muchos para los primeros dias, yo me las apañe perfectamente con 6 bodys, 6 camisetitas desas de abrochar por delante, 3 pijamitas de los cuales solo utilice 2, no me dio tiempo a mas, y 4 polainas, 2 camisetas de manga larga, 1 peludito, luego a mayores tenia 1 abriguito, 1 buzo, y las chaquetitas esas que hacen las abuelas, por cierto super monas. A las dos semanitas de vida mi peque ya no utilizaba nada de eso, ya pasara a la talla 62 cm, tener en cuenta que nacio con 4 kilos, era grandecito. Siempre es mejor comprar una talla mas, siempre de pueden remangar las mangas, ahorramos en ropa y nos dura mas tiempo. Eso respecto a la ropita, despues lo basico, una bañerita, en mi caso me decidi por bañera-cambiador, me parece mucho mas comodo, no tener que agacharse es un plus muy grande, una cunita con un buen colchon, yo recomiendo uno viscoelastico, el cochecito, la sillita del coche, una hamaca-columpio, la verdad que me salvo la vida en mas de una ocasion, el peque se lo pasa pipa, esto mas bien es un opcional, otra cosa opcional seria la mochila portabebe, yo elegi la ergobaby, la verdad yo no era muy partidaria de utilizar mochilas portabebes pero es una maravilla, otro dia comento sus multiples ventajas, el moises, creo que es necesario por que al principio los bebes no se encuentran comodos ante tanto espacio en la cuna, les gusta estas mas recogiditos, como estaban con mama. Otro cositas indispensables son por ejemplo: unas tijeritas, gasas, alcohol de 70 para la cura del ombligo, esponjita natural, colonia, geles y champus...etc Pues esto es todo lo que compre al principio para la llegada de mi pequeño.

Unos baberos superadsorbentes

Bueno, hoy os traigo un invento que estuve maquinando el fin de semana, el renacuajo tiene mucho reflujo y ultimamente le dio por babear continuamente, por tanto no hay dia en el cual no lo tenga que cambiar tropecientas mil veces de ropa y otras tantas de babero, en resumen, en cuestion de un dia acababamos con el repertorio de baberos, que por cierto no son pocos. Cansada de probar baberos y baberos de todos los tipos sin funcionar ninguno decidi inventarlo yo, si mahoma no va a la montaña, la montaña va a mahoma, despues de mucho pensar aqui os dejo el resultado, el patron lo tome de un babero grande que le habia regalado mi madre:
Utilizamos un bies de colorines para uno y para otro uno de rayitas azules y blancas
La parte delantera del babero esta compuesta por toalla bien gordita, para que absorba bien. Para decorarlos un poco y que no quedaran lisos utilizamos retales de las telas que habian sobrado de los saquitos que le hicimos al pequeño
La parte trasera esta formada por un protector, tiene el tacto mas aspero, por eso decidi ponerlo por la parte de atras.
En vez de cordones prefiero el velcro, es muchisimo mas comodo a la hora se poner y sacar.

Los hemos probado durante todo el fin de semana, y eureca, dan un muy bueb resultado, utilizando un solo babero al dia la parte de abajo de la camisetita acaba algo humeda, pero nada que ver con como quedaba antes tras estar cinco minutos con un babero, chorreaba, no tenia salvacion, el cambio de ropa era irremediable, ayer probe a cambiarle el babero una vez, osea utilizar dos baberos, y perfectisimo, la camisita como nueva queda.

El primer baño del renacuajo

En el hospital una enfermera pasaba todas las mañanas a recoger al peque para llevarlo al baño, el caso es que siempre me lo devolvian super relajado, no se si por que se cansaba de llorar y quedaba agotado o le gustaba tanto que quedaba extasiado, me hubiera gustado saber el truco, pero no pudo ser, no me dejaron ir con ellas. Por tanto una vez en casa jugaba un poco a ciegas, asi fue, un verdadero desastre.

El primer baño que le dimos al renacuajo en condiciones fue tras caersele el cordón. La verdad es que nos lo curramos bastante,  encendimos el calefactor para que el baño estuviera a una temperatura agradable, preparamos todo para tenerlo listo, pañal, crema del culete, aceite de almendra para el masaje, pijama y body limpios, una toquilla para que no cojiera frio al salir del baño, una toalla, tuvimos mucho cuidado con la temperatura del agua, pero nada, no hubo manera, los llantos se escuchaban en toda la urbanizacion, eso hizo que todo transcurriera más forzado, y que acabáramos sacándolo muy pronto del agua. Pero ni asi se tranquilizo, siguio gritando y gritando hasta que estuvo vestido.
El siguiente baño fue mejor, parecia que ya le empezaba a gustar un poco el agua, pataleaba pero no lloraba, le echabamos agua por encima con un cubito y el tan contento, el problema empezo con la esponja y el jabon, no le gusta nada que lo laven, solo que le echen aguita por encima. La hora del masaje con el aceite de almendras o la crena hidratante tambien es un caos, no le gusta nada de nada, algo que deberia relajarle le altera aun mas, por tanto decidimos echarle crema hidratante solo  por los granitos que le aparecieron por toda la parte de delante del cuerpecito.

Consejos para un baño tranquilo:
Tener una muda limpia, un pañal y la toalla a mano
Tener el cuarto de baño calentito, nosotros lo que hacemos es encender la estufa unos 20 minutos antes del baño del peque
Es muy util el uso de un termonetro para medir la temperatura del agua, esta debe de estar entre 32 y 38 grados, al peque le gusta mucho a 37 grados, descubrimos despues de mucho probar que con esa temperatura conseguiamos un baño tranquilo, sin llantos.

Postparto, tres semanas despues

¿Cómo me encuentro?
La verdad es que lo estoy llevando bastante bien, los puntos se me cayeron más o menos a los diez días, primero tres y luego dos, no me dieron mucho la lata, me molestaban lo justo y necesario, al ir al baño por ejemplo me tiraban bastante, hubo un día que lo pase muy mal, estaba muy estreñida y pensaba que se me iban a abrir, pero no fue así, he de decir que se me secaron muy rapido, me recomendaran un gel pars echar en la ducha, epixell, que me fue muy bien, ademas tambien sirve para cicatrices y heridas, respecto a la almorrana dejo de molestarme en el hospital, por tanto ese ya no era un problema. La sangre empezó a ser cada vez más escasa y a cambiar de color, cuando llegue a casa cinco días después de dar a luz aún era rojiza, poco después se volvió marronacea, y una semana más tarde ya casi no había restos de sangre, manchaba de color amarillo, sobre todo manchaba más después de darle el pecho al niño, debe de ser por las contracciones del útero.  Físicamente estoy muy recuperada, casi no tengo barriga, la verdad es que tras el parto casi no me quedo nada, las enfermeras se extrañaban de que sólo me quedara esa barriga tras haber expulsado un niño tan grande. Lo que sí me quedaron son las estrías que me empezaron a aparecer al final del embarazo, eso, un ombligo muy hundido y la línea alba súper marcada. Mi madre dice que tengo la barriga morena.
Mentalmente también me encuentro bastante recuperada, aunque aún tengo algún momento de bajón, son puntuales, nada que ver cuando llegue a casa, estaba llorando por las esquinas todo el día.

Recordando los primeros dias de vida del renacuajo

Pronto nos quedamos los tres solos, una enfermera vino a ponerme al pecho al niño, sin exito, me hacia un daño terrible, pero soportable aun, al final de la toma acabe con ese pecho morado, pero segun aquella enfermera tan agradable, ironicamente por supuesto, era normal el dolor, mando a mi pareja controlar que el suero me gotease correctamente y darle un bibe al niño por si no le llegaba la leche del pecho, no hizo falta.
Lo primero que me pregunto la enfermera cuando me vio fue mi edad, me veia demasiado joven, lo segundo que estudiaba y lo tercero lo valiente que habia sido al tener al niño, que muchas otras personas hubieran abortado, despues se marcho y hasta las tres horas no aparecio de nuevo, me ayudo a levantar junto a otra enfermera, me llevaron al baño para que meara y pusieron una braga desechable y unas compresas, me cambiaron la cama encharcada de sangre, la verdad es que no paraba de sangrar, asi tengo la anemia que tengo, me volvi a acostar, parece que sangraba menos, me mandaron descansar pero no podia dormir, miraba al niño, como respiraba me asustaba pese a ser lo normal, al final me dormi un ratito, sabía que mi pareja permanecería despierto toda la noche controlando todo. Una anécdota curiosa que siempre recordare de esa noche es la primera caquita de Mateo, el famoso meconio, negro como el chapapote, súper pegadizo y pastoso, nos gastamos un paquete de toallitas entero en limpiarle bien el culito, y como no teníamos más estuvimos toda la noche rezando para que no se ensuciara otra vez. Al día siguiente estaba deseando que llegara mi madre, la noche anterior no le había dado casi ni tiempo a ver al niño, me hacia mucha ilusión que conociera a su nieto, limpito ya, más ilusión le hacía a ella, se le notaba un brillo especial en los ojos, estaba orgullosa de lo precioso que era su nieto, y por supuesto lo sigue siendo. Me daba seguridad que estuviera allí, además mi pareja se iba a descansar por la mañana, y no me hacia la idea de quedarme sola, aún no me atrevía a levantarme de la cama sin ayuda, me daba la sensación de que me iba a caer o no iba a poder andar, los puntos me tiraban, y la almorrana que tenía, más bien el racimo de uvas no ayudaban para nada, al levantarme me ardían los oídos, me pitaban, y me sentía inestable, tal vez eso fuera sintoma de la anemia que me diagnosticarían días después, mi madre me ayudo a ducharme, la sangre corría por mis piernas, me asombraba, entro una enfermera en el baño y la echo fuera, la doctora iba a pasar, menuda bordé la señora, me llamo inútil literalmente, que no estaba operada que podía valerme sola, flipante, la doctora me receto una crema para la almorrana y ponerle hielo 3 veces al día, poco después llegó mi abuela, coleo un poco al niño hasta que le entró el hambre, y ahí empezó mi suplicio, el renacuajo no se enganchaba, lo acercaba a la teta y se ponía a llorar, en esos momentos mi desesperación era máxima, temía que tuviera hambre y no fuera capaz de darle de comer, tan rallada estaba que al día siguiente al mediodía quise pedir un biberón, doy gracias a que no me lo dieran, la enfermera me explico que era normal que las 24 horas después al parto el bebe entrara en una etapa de vagueza mezclada con sueño, que desaparecería 24 horas después, y así fue. Ese día vino Elena a verme por la tarde, yo me encontraba fatal me dolían los riñones muchísimo, no sabía como colocarme para dormir, di miles de vueltas en la cama hasta que al fin me quede dormida, esa misma tarde tuve compañera de habitación, había tenido una niña. La noche fue terrible, la niña no paraba de llorar, era imposible dormir, cuando el renacuajo lloraba mi pareja me lo colocaba en el pecho y se quedaba dormido, y yo con el, mi pareja vigilaba que no se me escapase de las manos. Parecía que mi calor, el latido de mi corazón le tranquilizaba. Llego la mañana y con ella mi madre, me hicieron una analítica y pasó la doctora, todo marchaba correctamente, dependiendo de los resultados de la analítica me darían el alta el jueves o no. Se llevaron al peque al baño diario, lo agradecí, pude descansar un rato y me lo trajeron súper relajado. Como todos los días, vino mi abuelo, mi tía, mi tío, mi padre, mis primos, y la madre de mi pareja, el día se pasaba bastante rápido, lo peor era la noche, el pequeño comía más a menudo y me dolían un montón los pechos, tan fuerte era el dolor que la noche siguiente dado que no me dieron el alta me puse las pezoneras, me salvaron la vida. El jueves me pusieron una bolsa de hierro, y el sábado me pondrían la otra, eso significaba quedarme allí dos días más, cuando me lo comunicó la doctora se me vino todo encima, quería irme, no aguantaba más allí, me dolía todo, estaba harta de la comida y quería ducharme en condiciones, me eche a llorar antes de que llegarán de nuevo mi pareja y mi madre, me pase llorando bastante rato sin que nadie se diera cuenta. Al ponerme el hierro tuvieron que cambiarme la vía, que mal lo pase, la sangre borbotaba por todos lados, se manchó la cama, el suelo y mi brazo. El peor día sin duda fue ese, el viernes tampoco fue un gran día pero me quedaba el consuelo de que el sábado salía. Por fin llego el sábado, y con el la vuelta a casa, la tensión me había dado algo alta, yo ya pensaba que no saldria de allí nunca, también me atemorizaba que no le dieran el alta al niño, estaba un poco amarillo y no sabía que me iban a decir, pero todo salió bien y a las tres de la tarde estábamos saliendo por la puerta, le deje la habitación libre a la nueva chica que había subido ese mismo día, la pobre venía sin el bebe, lo habían sacado con ventosa y lo estaban monitorizando, pensé lo afortunada que había sido yo, me hubiera dado algo si me separan de mi bebe al nacer.

Recordando el momento del parto

Cuando ya habia asimilado que ingresaba el lunes 16 de marzo a las nueve de la mañana, y que seguramente me tendrian que inducir el parto, no podia imaginar lo que iba a pasar. Pasaban ya las doce de la noche, me estaba quedando dormida, esa noche habia decidido dormir en el sofa, tenia una catarro tremendo, me costaba respirar y tenia muchos mocos, a cada rato me despertaba un dolor estremecedor que me atacaba los riñones y los ovarios, parecia que las contracciones irregulares de dias atras y horas antes se habian intensificado, sabia que el parto se acercaba, para mi sorpresa las contracciones seguian siendo irregulares, cada 4 minutos, cada 2 minutos o incluso cada minuto, no me daban respiro, aguante como pude hasta las 7 de la mañana, la verdad es que la pelota me sirvio de gran ayuda, llegamos al materno sobre las 8 menos cuarto, desayunamos, intente aguantar hasta la hora de ingreso, pero no podia mas, vinieron pronto a buscarme, me tomaron la tension, y como siempre la tenia por las nubes, mis nervios estaban a flor de piel, me tomaron la temperatura, sorpresa tenia algo de fiebre, genial, tenia que aparecer justo en ese momento, me subieron a monitores, no se dieron mucha prisa, ya que yo aparentaba estar muy tranquila por lo tanto no habia prisa, otra vez me tiro por el suelo y monto un numerito, si eso es lo que necesitan..estuve un buen rato monitorizada, las contracciones eran muy seguidas, me volvieron a tomar la tension y a mirar la fiebre, todo estaba correcto, al cabo de un tiempo me llevaron a una habitacion donde estuve sobre dos horas, era desesperante, no sabia como colocarme, no encontraba la postura, y por alli no aparecia nadie para examinarme, tatatachan por fin aparecio una enfermera y me llevo a la sala de exploracion, alli la ginecologa me dijo que ya estaba comenzando el trabajo de parto, tenia el cuello borrado y 3 cm de dilatacion, en la habitacion me pusieron un enema, y enseguida me bajaron para la sala de dilatacion, me llevo una señora muy agradable en silla de ruedas hasta la sala, alli me esperaba una matrona, me coloco las cintas de los monitores, los goteros correspondientes incluyendo la penicilina y se marcho, de ahi a un tiempo volvio y me coloco un gotero de oxitocina para que las contracciones se volvieran mas regulares, cada vez eran mas seguidas, el dolor se volvia insoportable y sin tregua, por eso decidi poner la epidural, pese a saber que el efecto podia verse mermado antes de llegar a la fase del expulsivo, pero en ese momento solo pensaba en el dolor de cabeza que tenia, lo cansada que estaba, y lo que me quedaba por dilatar, necesitaba dormir un poco y solo seria posible si me ponia la epidural, me llevaron a otra habitacion, me pusieron un gorro verde en la cabeza, me mandaron sentar abrazando una almohada, y avisar cuando tuviera una contraccion, me pincharon dos veces, la verdad es que no me dolio, solo senti un hormigueo en el culo que se paso al instante, volvi a la habitacion donde estaba anteriormente, la enfermera que me acompaño se quedo sorprendida por las contracciones q tenia, de hecho me pregunto, ¿todas esas contracciones son tuyas? Caray, si señor mias y solo mias, estuve sola un ratin, el dolor iba disminuyendo, me quedaba dormida a ratos, el tiempo pasaba bastante rapido, cuando la matrona volvio a entrar ya habia dilatado 4-5 cm, entraba mas o menos cada hora, o hora y media, y cuando entraba mi pareja tenia que salir, aprovechando asi para tomar algo e informar, me tuvieron que poner una sonda para sacar el pis, la matrona nos dijo que sobre las 11 tendria al niño, la siguiente vez que volvio a entrar me rompio la bolsa para ver si dilataba aun un poquito mas rapido, el liquido parecia claro, pero podia ser meconial, no lo tenia seguro, me puso un antibiotico para bajar la fiebre q me estaba subiendo, lo agradeci, ya que desaparecio el dolor de cabeza, pero la fiebre seguia, ya estaba dilatada unos 6 cm,mi pareja estaba muy nervioso, el monitor se volvia loco, pitaba, aparecian luces rojas, el latido del bebe disminuia de repente, pero todo estaba en orden, se movia mucho y movia las cintas con el, la matrona aparecio de nuevo, con una bolsa nueva de penicilina, mas suero, y algo para ablandar el cuello que estaba algo rigido, me mando empujar para bajar la cabeza del bebe que estaba muy arriba, pero se encontraba en posicion adecuada, estaba dilatada 7-8 cm, el dolor comenzaba a parecer de nuevo, cada vez se hacia mas fuerte, los riñones me mataban, retorcia las piernas como de costumbre ante el dolor, me daba bolos pero no funcionaban, el efecto de la epidural tocaba su fin, la dilatacion se quedo estancada, el tiempo parecia eterno, no pasaba, no sabia como colocarme en la cama, me suministraron otro calmante pero nada, ya nada hacia efecto, solo me durmio las piernas, eso ayudo a relajarme un poco y zas de repente empece a sentir una presion muy fuerte en el culo, parecia que me fuera a salir la caca, seguia con la misma dilatacion pero la cabeza cada ves estaba mas abajo, me pusieron otro antibiotico, que consiguio bajar la fiebre, la matrona volvio a despedirse, su turno acababa aqui, pero me hizo un ultimo tacto, y sorpresa ya estaba casi en dilatacion completa. Yo seguia empujando sola en la habitacion, mi pareja me ayudaba a sujetar las piernas, veia la cabecita del bebe, fue a avisar a alguien, aparecio otra matrona, me dijo que no empujara, que esperara media hora y que ella volvia y empujaba conmigo, ese sin duda fue el peor momento, soportar las contracciones sin empujar era desesperante, no paraba de preguntar la hora, otra vez no pasaba el tiempo, la matrona aparecio a las 22:27, no me lo podia creer ya podia empujar, me ayudo con los pujos, me sugerio que me agarrara al cabecero de la cama e hiciera fuerza, la verdad es que asi era mucho mas facil, no podia mas, ya sentia la cabecita del bebe entre las piernas, demasiada presion, por fin me llevaban para paritorio, me cambiaron de camilla, me agarre fuerte a unas barras que tenia la cama y empuje en cada contraccion por lo menos dos veces, senti un pequeño corte, pero no me dolio, al siguiente pujo note como salia la cabeza, tras ella los hombros, me mandaron parar de empujar y salio el resto, fue una sensacion de liberacion muy grata, senti como se me abria todo para hacerle paso al niño, por fin estaba conmigo, le cortaron el cordon rapidamente y se lo llevaron a aspirar los moquitos ya que el liquido finalmente se considero meconial, mi niño no paraba de llorar, y yo me sentia tan rara, no me lo podia creer, mi hijo acababa de nacer, me daba la risa nerviosa, lo escuchaba y me temblaba todo, no paraba de repetir mi niño, mi niño, no veo a mi niño, finalmente  mi pareja me lo trajo, cuando lo vi por primera vez me invadio una emocion muy grande, nunca habia imaginado ese momento y por fin habia llegado, no lo creia, tenia a mi niño en brazos, no sabia como agarrarlo, pesaba mucho, o yo estaba muy debil que tambien puede ser, le toque la carita, tenia los ojitos sucios y no podia abrirlos, finalmente los abrio, me sorprendio lo grandes que eran, mi voz le calmaba, me agarraba un dedito, estaba tan sumamente sumergida en su ser que no me daba cuenta de lo que sucedica a mi alrededor, me mandaron empujar y senti salir algo, supuse que seria la placenta, me cosieron y mandaron a mi pareja afuera a avisar a la familia, yo mientras me cambiaba de camilla y me ponia de lado para recibir nuevamente a mi bebe, mi niño peso 3880 gr, y nacio a las 22:45h. La camilla empezo a moverse, me trasladaban a la habitacion, fuera estaban mi madre, mi padre, mi abuelo, mi abuela, mi primo, mi tio y mi tia, todos expectantes ante mi salida, entre todos rodeaban la camilla, sacaban fotos, y admiraban al pequeño, la enfermera siguio arrastrando la camilla, una vez en la habitacion me dieron todos la enorabuena y un beso, entonces se tuvieron que ir. Por fin estabamos solos los tres.

¿Que cochecito elegimo?

Teníamos muy claro las características que queríamos en nuestro cochecito, que fuera ligero para poder transportarlo con facilidad, de pliegue fácil, y tres piezas, capazo, sillita y maxicosi grupo 0. Cuando llegamos a la tienda me enamore de un cochecito que estaba en la entrada de exposición, pero era sólo de dos piezas entonces  le pedimos a un chico que nos enseñara modelos parecidos a ese con las características que queríamos, había dos de Jane, uno con suspensión y otro sin ella, ahí estaba nuestra duda, con suspensión pesaba unos kilos más , pero para donde vivimos nos cundía más que tuviera suspensión, además que lo probamos en arena, tierra, piedras, césped, y rodaba muy bien, y además era muy ligero a la hora de empujarlo, iba sólo. Nos quedamos pues con el Epic Koos Nanos, ahora tocaba el dilema del color, después de mucho pensar nos quedamos con el rojo que acabo siendo negro. Lo que parecia haber sido la eleccion perfecta acabo siendo mi peor pesadilla, al mes y medio de uso empezaron a fallar los frenos, cuando frenabas muy bien las ruedas traseras se quedaban bloqueadas, ¿pero que pasaba cuando querias poner en marcha el cochecito? Pues que no se podia, una rueda se quedaba bloqueada, mas concretamente la derecha, teniamos que darle una pequeña patada para que rodara, la cosa no acabo ahi, a los dos meses las ruedas delanteras comenzaron a fallas, no giraban, solo iban en linea recta, si querias girar tenias que pinzar el carrito, como esta en garantia llevamos a arreglarlo, nos lo trajeron, lo probamos en tienda y las ruedas delanteras seguian fallando, temblaban un monton, lo volvieron a mandar a arreglar, otros diez dias sin cochecito, finalmente nos lo devolvieron, llegamos con el a casa y diez dias despues volvieron a fallar los frenos, en resumen ya no lo llevamos, total otro no nos dan y no sirve de nada que lo arreglen si vuelve a fallar al momento, FUTURAS MAMAS SI TENEIS PENSADO COMPRAR ESTE COCHECITO NO LO HAGAIS, SOLO EXISTEN FALLOS.
Hoy por hoy si fuera a comprar un cochecito sin duda seria un Bugaboo, tiene un capazo super amplio, nuestro bebe no tendria ningun problema de espacio, se pliega de manera muy facil, la sillita es reversible, basta con cambiar el manillar de sentido, tiene la capota super grande para cubrir del sol sin necesidad de sombrilla, que por cierto son un coñazo, las ruedas de atras se pueden colocar delante para terrenos mas inestables, se puede llevar como un "carretillo" para ir comodamente por la playa, un sin fin de ventajas, hoy por hoy no lo dudaria, pero como de momento no tengo el poder de dar marcha atras en el tiempo tendremos que esperar al siguiente bebe.

Nueva adquisicion: Romer Dual-Fix

Aprovechando el viaje para dejar el chasis del cochecito a reparar miramos la sillita para el coche, en principio la íbamos a escoger del grupo 1/2/3, pero como el renacuajo aun no pesa 9 kilos y como esas sillitas están homologadas para bebes de 9 meses y para eso aun queda bastante, pues decidimos mirar una del grupo 0/1, es verdad que del grupo 0 teníamos el maxi-cosí que nos traía el cochecito, pero como que ya se le esta quedando pequeño a lo ancho, el renacuajo es muy grande para sus meses y ya le es un poco incomodo en cuanto a movilidad y espacio, así mismo otro problema era que al no tener sistema isofix se tambaleaba al moverse el coche, por tanto era un peligro, muy poco seguro. Yo la verdad es que ya tenia una sillita en mente y era la Dualfix de Romer Britax, me parecía estupenda, súper practica y cómoda al girar 360 grados no hay que hacer filigranas para meter el bebe en el coche, que si cuidado con la cabeza, que si así lo estas metiendo mal, que si no veo para ponerle los arneses, que si voy por un lado, que si mejor vamos por el otro, en fin un autentico peñazo. Otra cosa que me parecía espléndida de esta sillita era su grado de reclinamiento, deja al bebe muy recostado y eso es un plus por que los pobres aun no saben sostener la cabecita y cuanto mas reclinada se pueda poner la sillita menos les colgara la cabeza, lo único que me echaba para atrás era el precio, 533 euros me parecía una barbaridad, pero la suerte llamo a mi puerta, casualmente había una sillita rebajada al 10 por cien por un rasguño que ni siquiera se ve, vi la oportunidad y la caze al vuelo, para mi dije, son los 477 euros mejor invertidos del mundo, solo llevo unas horas con ella y la verdad es magnifca. Espero tener mas suerte que con el carro, una cosa tengo clara, SE ACABARON LOS PRODUCTOS DE JANE EN MI CASA
En otra entrada comentare la tan erronea decision que tome con la eleccion del cochecito, sus fallos y cual elegiria si lo tuviera que comprar ahora.